Cuando la gente se le estaba escapando de la concentración en la avenida Bolívar, en la tarde de hoy primero de mayo el presidente Nicolás Maduro anunció la convocatoria de una Asamblea Nacional Constituyente originaria, basado en las potestades que le otorga la vigente y recurrentemente violada Constitución Nacional, que fue promulgada el 20 de diciembre de 1999 y calificada por su mentor Hugo Chávez como «la mejor del mundo».
Maduro dijo que en las próximas horas, en consejo de ministros, sería firmado el decreto correspondiente. Sin embargo, ha sido convocada esta misma noche una reunión en el salón Ayacucho en el palacio de Miraflores en el que se establecerán las bases comiciales y el nombramiento de comisiones de trabajo, cuya composición el mismo presidente adelantó en el acto público.
Mientras tanto, en diversas zonas de la ciudad y en todo el país se estaban realizando manifestaciones de protesta contra el autogolpe de Estado perpetrado por el Tribunal Supremo de Justicia a través de sentencias que suprimieron de facto las potestades de la Asamblea Nacional. Varios heridos fueron reportados en Caracas, incluyendo al diputado José Manuel Olivares, quien resultó impactado en la cabeza por una bomba lacrimógena que ameritó 12 puntos de sutura.
Mencionó Maduro que esa comisión presidencial la presidirá el actual ministro de las Comunas Elias Juaua Milano y la integrarán Hermán Escarrá (considerado el creador de la estructura del nuevo orden), Aristóbulo Isturiz, Earle Herrera, Cilia Flores, Isaías Rodríguez, Iris Varela, Francisco Ameliach, entre otros funcionarios gubernamentales. No mencionó como integrante de esa comisión presidencial a José Vicente Rangel, a quien días antes había indicado que junto al abogado Escarrá se encargaría de buscar «una salida a la crisis que vive el país».
Maduro se encomendó a Dios, a Chávez, a sus ancestros y a cualquier otro fantasma etéreo mientras trataba de aterrizar para anunciar la decisión que había adoptado. «No queremos una guerra civil», dijo. «Vamos a transformar el Estado, sobre todo esa Asamblea Nacional podrida que está allí», amenazó. «Para que el pueblo tome todo el poder de la patria», siguió.
El artículo de la Constitución Nacional que le otorga tales potestades al presidente es el 347.
«Vamos a constitucionalizar las Misiones y a dejar grabados para los próximos 50 años los derechos de los jóvenes y de los estudiantes», prometió.
Maduro habló de una Asamblea compuesta por unos 500 constituyentistas, unos 200 de ellos «electos por la base», de las comunas, de la clase obrera, de los pensionados, y otros 300 electos a nivel territorial «con carácter municipalista».
PREPARADO AL BATE
El canal de televisión Telesur tenía preparado al abogado Hernán Escarrá para que explicara los alcances de la propuesta que minutos antes había hecho Maduro.
Antes de entrar en honduras, el ex constituyente del 99 que se había deslindado brevemente del gobierno y luego volvió a servirle como agente gris, advirtió que esta Constituyente «no va a disolver ningún poder sino que va a coexistir con ellos». No supo precisar el tiempo que se tardaría el proceso entre la convocatoria, la elección de sus componentes, el debate de su contenido y la promulgación: «pueden ser tres meses, o seis…»
– En esta situación tan difícil que está viviendo Venezuela, lo que se quiere es establecer un diálogo superior en medio de una situación de conflicto… El voto será por circunscripciones locales y regionales y por sectores (productores, campesinos, obreros, etc.). Por ello habrá doble voto, uno por el sector al que se pertenezca y otro nominal. Esta será una Constituyente electiva. Servirá para crear un escenario para un «diálogo mayor».
Escarrá advirtió también que «no se trata de una nueva Constitución, sino de modificar al Estado. Básicamente es para adicionar las Misiones. Es un paso hacia la paz, previendo un conflicto social grave».
Desde los estudios de Telesur le preguntaron a Escarrá: «¿En esa Constituyente podrán participar los sectores violentos?» Al momento de responder, se desconectó la comunicación, y no se pudo conocer la respuesta, o el abogado fingió desconexión con el fin de no derramar aún más gasolina al pasto nacional.
intervención de la ONU ya en Venezuela! Hay que sacar a ese loco del poder