Una concentración frente al Parlamento en Oslo sirvió para reunir a los venezolanos y noruegos e informar a los medios de comunicación acerca de la falta de democracia del gobierno chavista, y de la actual situación de crisis que atraviesa el país, al punto de que la embajada de Noruega en Caracas debió cerrar sus puertas en 2012.
Más de un centenar de venezolanos residentes en la fría Oslo le dieron calor a las actividades internacionales de protestas contra el gobierno de Nicolás Maduro, al denunciar en una concentración pacífica la feroz represión policial en Venezuela, con más de 40 asesinados por disparos de la Guardia Nacional y de los llamados colectivos paramilitares, y la flagrante violación de la Constitución al no reconocer las competencias legales que le corresponden a la Asamblea Nacional.
Los manifestantes se reunieron el pasado jueves 11 de mayo, a las 17 horas frente al Parlamento de Oslo, al cual asistieron alrededor de 150 personas, mayormente venezolanos pero también noruegos amigos o familiares.
Los organizadores fueron Cristian Bay, Erika Trejo, Sonia Zapata y Valeria Piquero. Los oradores fueron Maylem Meneses (VE, ingeniera), Flor Santamaría (VE, reportera), Lars Marius Holm (noruego, abogado), Arve Willassen (noruego, economista), Clara Pedreira y Valeria Piquero (VE).
En el acto se recogieron firmas para un documento que se entregó al presidente del parlamento para solicitar que Noruega fije una posición fuerte en condenar la dictadura en Venezuela. Se hizo también un acto en memoria de los caídos y fueron entonadas un par de canciones (Venezuela y Viva Venezuela) con el objetivo de levantar el ánimo para seguir luchando, además del himno nacional.
Los venezolanos informaron a los ciudadanos y medios noruegos que en Venezuela existen tantas irregularidades que la embajada de Noruega en Venezuela cerró sus puertas en diciembre de 2012 debido a la grave situación de inseguridad a que estaba expuestos su personal.
“El pueblo está en las calles de Venezuela desde hace más de un mes exigiendo elecciones generales libres; un canal humanitario de ayuda con alimentos y medicinas; la liberación de los presos políticos y el desame de los paramilitares (guerrillas urbanas armadas por el régimen)”, dijeron.
Hace dos meses muy pocos noruegos conocían la situación venezolana, por nombrar sólo algunos:
• Falta de alimentos y medicamentos
• Largas colas para comprar comida
• Personas enfermas que mueren por falta de medicamentos,
• Tasa de inflación anual de 700% en 2016
• 11.466 bebés (menores de 1 año) murieron en 2016
• 756 mujeres embarazadas que perdieron la vida en 2016
• 28.000 venezolanos que fueron violentamente asesinados en 2016
Hoy en día, casi todos los noruegos y el resto del mundo son conscientes de todo esto gracias al valor de los venezolanos que finalmente han decidido que han tenido suficiente.
Muchos venezolanos residentes en Noruega desearían estar en su tierra luchando juntos con sus familiares y amigos, y no ven otra forma de ayudar que denunciar a diario al funesto régimen de Nicolás Maduro.
“Estamos aquí hoy porque estamos cansados de llamar a casa a nuestra familia y sólo escuchamos quejas y terribles historias sobre cómo su vecino fue robado y asesinado, cómo su primo se está muriendo por falta de medicina o cómo los amigos de la escuela están saliendo del país para encontrar un futuro mejor. Estamos aquí porque sabemos que Venezuela tiene los recursos y la gente para ser un lugar mucho mejor y también porque es el país que nos dio lo que tenemos y quiénes somos”
En la concentración, a la cuales asistieron muchos noruegos, Ayala denunció que en Venezuela hoy no existe la separación de poderes, y que desde hace años el chavismo tomó el control de todos los poderes públicos: judicial, legislativo, electoral, moral; así como de los 4 componentes que conforman las fuerzas armadas, a la que han infiltrado con miles de agentes cubanos. El ejemplo más reciente de esto fue en diciembre de 2015, donde la oposición logró de manera abrumadora ganar la mayoría absoluta de la Asamblea Nacional, venciendo el fraude electoral, ante lo cual el régimen nombró ilegalmente nuevos jueces chavistas en el Tribunal Supremo de Justicia quienes posteriormente anularían todas la decisiones de la Asamblea e incluso desincorporaría a tres de los diputados electos para así romper la mayoría calificada”.
“No podemos estar en el campo de batalla, pero eso no nos quita nuestra alma de guerreros. Por favor, participad y sed activos. Necesitamos aumentar la conciencia en las personas y debemos hacerlo de la manera correcta. Tal vez medio millón de venezolanos estén peleando en las calles. Nosotros, el resto de nosotros, también podemos dar una contribución invaluable. Hagamos presentaciones, videos, folletos con hechos y presentarlos a otros o publicarlos en sus redes sociales. Discutamos la política de Venezuela con otros que piensan diferente. Puede ser difícil pero no imposible”.