Los venezolanos huyen por el norte, por el oeste y por el sur, en avión, en autobuses y hasta en peñeros que les llevan a las caribeñas islas ABC. En todos los destinos encuentran dificultades. Por el sur, hacia el Amazonas, se trasladan miles de migrantes, que buscan en Brasil, especialmente en el estado de Roraima, un lugar donde vivir y trabajar. Según la legislación vigente, la única opción para regularizar su estancia en Brasil es solicitar estatus de refugiado.
Ante la gran cantidad de migrantes registrados, que han saturado las posibilidades de atención de las autoridades locales, y de las masivas deportaciones que se realizaron el año pasado, el Consejo Nacional de Inmigración de Brasil publicó este miércoles una resolución que permite la residencia temporal durante dos años a venezolanos sin que tengan obligación de recurrir al complejo mecanismo de refugio, según informó la agencia de noticias AFP.
La decisión obedece a un pedido de la Fiscalía y organizaciones de derechos humanos para auxiliar a los miles de venezolanos que han ingresado a Brasil por el estado de Roraima en el último año, huyendo de la crisis económica en su país.
“Los venezolanos que están viniendo a Roraima no necesariamente están huyendo de una persecución (…), no necesariamente se encuadran dentro de la condición de refugiado”, explicó a la AFP Camila Asano, coordinadora de la Política Externa en la ONG Conectas.
Además, argumenta la Fiscalía, el aumento de solicitudes de refugio saturó la capacidad de atención de las autoridades locales. El flujo saltó de un solo pedido de refugio en 2010 a los 1.805 contabilizados en 2016, según datos del Ministerio de Justicia recolectados en el estado de Roraima.
El portal brasileño exame.com señaló en agosto pasado que las autoridades no tienen un recuento exacto del número de personas que han entrado en el territorio de Brasil en esas condiciones, pero estiman que ya pasan de 30 mil.
A partir de la nueva resolución, quienes soliciten la residencia temporal deben presentar solo una serie de documentos básicos que comprueben, entre otras cosas, que no tienen antecedentes penales.