El anuncio de la Eurocámara se impuso a los otros dos finalistas, la activista guatemalteca por DDHH, Aura Lolita Chávez Ixcaquic y el periodista Dawit Isaak, encarcelado en 2001 en Eritrea
La Eurocámara galardonó este jueves a la oposición venezolana con el premio Sájarov a la libertad de conciencia, un reconocimiento que corona su apoyo a la Asamblea Nacional de Venezuela y a los «presos políticos», indicaron a la agencia de noticias AFP varias fuentes parlamentarias antes del anuncio oficial.
A propuesta del principal grupo, el Partido Popular Europeo, y de sus socios liberales de ALDE, la «oposición democrática de Venezuela» se alzó con este reconocimiento a la defensa de los derechos humanos y las libertades, en un momento de división en su seno. En representación de la oposición, los premiados son la Asamblea Nacional (Parlamento) y su presidente, Julio Borges, y los opositores privados de libertad Leopoldo López, Antonio Ledezma, Daniel Ceballos, Yon Goicoechea, Lorent Saleh, Alfredo Ramos y Andrea González, considerados por la Eurocámara «presos políticos».
Esta Asamblea comenzó sus sesiones en diciembre de 2015 con el triunfo por mayoría absoluta de la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) en las legislativas, que dejaba al Gobierno de Nicolás Maduro sin uno de los pilares fundamentales del Estado.
Desde entonces, varias sentencias de un Tribunal Supremo que es percibido por muchos como el brazo ejecutor del Gobierno han dejado sin poderes a la Cámara, que fue previamente declarada «en desacato» para justificar estas medidas. Sus diputados llevan más de un año sin cobrar sus sueldos, y algunos de ellos fueron brutalmente agredidos por un grupo de civiles chavistas armados que asaltó la sede parlamentaria en julio.
El último golpe para esta Cámara -cuyas sesiones no son retransmitidas por los medios públicos, que sí sacan a Borges y otros diputados para acusarles de «traición a la patria» o «terrorismo»- llegó de la Asamblea Nacional Constituyente en agosto. Este suprapoder instaurado por el oficialismo se arrogó las atribuciones legislativas del Parlamento para -según numerosos analistas- poder aprobar presupuestos y que el Gobierno pueda seguir endeudándose internacionalmente, algo que no ha ocurrido al no lograr reconocimiento externo la Constituyente.
El más famoso de los presos políticos es Leopoldo López, líder del partido Voluntad Popular, en arresto domiciliario tras más de 3 años en un penal militar cumpliendo condena por ser declarado responsable, en un juicio lleno de irregularidades, de los disturbios tras una marcha antigubernamental en 2014.
Otro de los galardonados es el alcalde caraqueño Antonio Ledezma, también bajo arresto domiciliario. Fue detenido en 2015 por cargos de conspiración y asociación para delinquir por los que aún no ha sido juzgado. El edil de San Cristóbal (oeste) Daniel Ceballos fue apresado en 2014 por su implicación en la misma ola de protestas por la que se encarceló a López, después de que Maduro anunciara que el alcalde tenía preparada «una celda más fría y oscura» que la del líder de Voluntad Popular.
Ceballos está detenido por el servicio de inteligencia en su sede capitalina conocida como El Helicoide junto al alcalde del municipio Iribarren de Barquisimeto (oeste), Alfredo Ramos, cuya detención por no impedir cortes de calles durante protestas opositoras conmocionó al país en julio. Alfredo Ramos fue capturado por agentes de inteligencia armados y enmascarados que entraron por la fuerza en su ayuntamiento, donde el alcalde se había atrincherado con sus empleados.
La organización de derechos humanos Foro Penal ha registrado casi 12.000 arrestos arbitrarios por motivos políticos desde 2014 en Venezuela, y cifra en unos 400 el número de «presos políticos» en el país.