OMAR PINEDA –
Barcelona amaneció con ambiente tranquilo, a pesar de los 31 grados que pronosticaron para este domingo. Será por ello que desde tempranas horas (8 am, hora española) los venezolanos residentes en la ciudad condal se aglomeraron alrededor de las 15 mesas distribuidas en la capital de Cataluña para atender a la Consulta Popular.
Sólo se ha reportado un pequeño incidente con el regidor del distrito Les Corts (por la agrupación BenComú), Alejandro Colom, profesor de Economía de la Universidad Autónoma de Barcelona (@acolom), quien se negó a abrir el local, pese a que los representantes de la MUD poseían el contrato y la factura pagada. El asunto no fue problema. El coordinador de este sector, Leonardo Hernández, de la Asociación de Estudiantes de Cataluña, instaló, con ayuda de la gente, las mesas de votación en plena plaza, bajo custodia de los Mossos d’Esquadra (policía municipal).
BenComú (Barcelona en Común) es una de las agrupaciones que sostienen a la alcaldesa Ada Colau.
Desde entonces no se han reportado otras irregularidades y es poco probable que ocurran incidentes, en una ciudad tradicionalmente de izquierda, y con gran representación de Podemos y de la local CUP (Candidatura d’Unitat Popular) de extrema izquierda, anticapitalista y abiertamente activistas en Cataluña a favor del proceso bolivariano. De hecho, fue noticia la foto de un grupo de sus dirigentes con Maduro en Caracas, enarbolando la Estelada, bandera de Cataluña, en apoyo al proceso independentista.
Fuera de este hecho, por demás anecdótico, el proceso en Barcelona se espera se cumpla con normalidad y entusiasmo, según manifestó Vanessa Sánchez, directiva de la Asociación de Venezolanos en Cataluña, quien añadió que en esta Comunidad Autónoma residen cerca de 20 mil venezolanos, y “es probable que dos tercios de ellos acudan a votar en esta Consulta Popular”.
