Agentes de la Policía Nacional española desarticularon un entramado que explotaba sexualmente a venezolanos transexuales en Palma de Mallorca y Barcelona. Las víctimas eran captadas con engaños por la responsable de la organización en certámenes “Miss Trans” celebrados en Venezuela

 

La información la ha dado a conocer el cuerpo policial este 14 de agosto, aunque las investigaciones llevaban meses realizándose. Durante este tiempo, los agentes lograron establecer la estructura del entramando criminal: se trataba de tres organizaciones, una en Venezuela y otras dos en Barcelona y Mallorca, que como una sola red explotaba sexualmente a venezolanos captados en Venezuela e introducidos ilegalmente en España.

La policía confirmó que los responsables financiaban los implantes de pechos así como todos los gastos del viaje y les aseguraban unas condiciones que cambiaban a su llegada a España, donde les retiraban la documentación y forzaban, bajo amenazas, a ejercer la prostitución para saldar una deuda de 15.000 euros.

En la operación han sido liberadas 24 víctimas que vivían hacinadas en pisos en condiciones infrahumanas y debían estar disponibles las 24 horas para los clientes, a los que además tenían que ofrecer drogas.

CAPTADOS EN EL “MISS TRANS”

En la operación han sido liberadas 24 víctimas que vivían hacinadas en pisos en condiciones infrahumanas y debían estar disponibles las 24 horas para los clientes.

Las investigaciones confirmaron que trabajaban de manera coordinada tres organizaciones: una dedicada a la captación y traslado de las víctimas y otras dos a su explotación sexual. Para nutrirse de un perfil concreto, la líder de la organización captaba a sus víctimas en certámenes de “Miss Trans” y concursos similares a los que era asidua, donde ofrecía a jóvenes transexuales y homosexuales la posibilidad de venir a España. Para convencerlas, les mostraba las propiedades que poseía en España y les prometía gran prosperidad económica para ganarse su confianza.

A pesar de que las víctimas eran conocedoras de que venían a España para ejercer la prostitución, las condiciones acordadas en Venezuela diferían de lo que luego se encontraban al llegar. Ya en España se les informaba de la “deuda” que tenían y desde el primer día los obligaban a prostituirse, tanto en la calle como en pisos, y a hacer efectiva la entrega de dinero de manera periódica.

La policía ha confirmado que, además, las personas explotadas sexualmente eran frecuentemente castigadas con multas, lo que hacía aumentar la deuda inicial con la organización.

PROMOCIÓN Y EL CONSUMO DE FÁRMACOS
Uno de los grupos que explotaba sexualmente a venezolanos estaba dirigido por un ciudadano italiano y otro español, y operaba en un piso de Barcelona. La policía logró conocer que los cuatro encargados del local, bajo las órdenes de ambos, controlaban la explotación sexual, así como el cobro o las salidas cuando los servicios eran fuera del piso.

También participaban directamente en la promoción y el consumo de fármacos (viagra y similares) y de sustancias estupefacientes entre los clientes. Los agentes destacan que entre los distintos roles de los miembros de la organización estaba “el taxista” o persona de confianza, cuya tarea consistía en trasladar a las víctimas a hoteles o domicilios solicitados por la clientela, facilitando el pago de los servicios con tarjeta a través de un TPV.

4.000 EUROS DE BENEFICIOS MENSUALES POR CADA UNO

La investigación policial constató que cada víctima generaba unos beneficios de 4.000 euros mensuales a sus proxenetas. Con el resto de dinero debían pagar la deuda contraída con la organización, las multas que les iban imponiendo y otros gastos, con lo que apenas tenían dinero suficiente para vivir, lo que las obligaba a mantenerse en esa situación de explotación.

En los registros practicados por los agentes en Barcelona y Mallorca se han intervenido más de 3.000 euros en efectivo, sustancias estupefacientes, drogas de abuso y fármacos de diversas marcas, instrumentos para la elaboración de dosis de drogas, así como valiosa documentación y efectos informáticos cuyo contenido está siendo analizado por expertos.

La red que explotaba sexualmente a venezolanos situada en Palma de Mallorca también operaba en un piso donde al menos dos encargados controlaban los servicios. Era dirigida por un transexual en cuya casa también se suministraban estupefacientes, fármacos y drogas de abuso. Una vez obtenido el dinero de las víctimas, éste era ingresado en las cuentas bancarias de la líder de la organización.

CONDICIONES INFRAHUMANAS

En los registros practicados por los agentes en Barcelona y Mallorca se han intervenido más de 3.000 euros en efectivo, sustancias estupefacientes, drogas de abuso y fármacos de diversas marcas.

Entramado explotaba sexualmente a venezolanos. Fuente Policia NacionalLos investigadores han podido constatar las condiciones en las que las víctimas vivían en los pisos, prácticamente hacinadas en habitaciones deterioradas e insalubres. En ellas debían permanecer 24 horas al día a la espera de avisos para atender a los clientes.

Las habitaciones estaban llenas de literas, sin apenas espacios para caminar entre ellas, suciedad, basura y humedades en paredes, un espacio que contrastaban con el lugar destinado a la explotación sexual, mucho más cuidado. La Policía Nacional estima que las ganancias de los investigados por esta red que explotaba sexualmente a venezolanos superaban el millón de euros en cinco años.

La operación ha formado parte del Plan de la Policía Nacional contra la Trata de Seres Humanos con Fines de Explotación Sexual, puesto en marcha en 2013. Desde entonces se han realizado 1.400 operaciones, con más de 3.400 detenidos y más de 1.900 víctimas. Este Plan tiene activados la línea telefónica 900 10 50 90 y el correo trata@policia.es para facilitar la colaboración ciudadana y la denuncia, anónima y confidencial, de este tipo de delitos.

Tomado de www.yosoyvenezolano.com

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