SEBASTIÁN DE LA NUEZ –
La eurodiputada Dita Charanzová ─el acento final es imprescindible─ parece una modelo de Vogue pero no lo es; es una demócrata liberal que está clarísima en los sucesos de Venezuela. En esta entrevista explica su lucha desde Bruselas por devolverle la democracia a Venezuela (a pesar de la actitud de los socialistas).
No, no son sanciones económicas las que su grupo propone en el Parlamento Europeo, pues eso no haría sino perjudicar más al pueblo venezolano; lo que busca ALDE, el grupo parlamentario al que pertenece Dita Charanzová, son sanciones selectivas contra “oficiales” del gobierno venezolano. Por “oficiales” se refieren en Bruselas a los representantes del gobierno de Nicolás Maduro.
Esta bellísima mujer de ojos celestes vivió, de niña, bajo régimen comunista en su natal Checoslovaquia. Lleva esos recuerdos de juventud y sabe lo que significa una dictadura.
El 27 de abril es fecha clave en el Parlamento Europeo: habrá discusión sobre una “Motion for a resolution” que ALDE (Alianza de Liberales y Demócratas de Europa) está presentando. Sus miembros buscan el consenso previo en estos precisos momentos, pero los socialistas son una traba. Así lo denuncia Dita Charanzová.
ALDE plantea trece puntos en los que el gobierno de Nicolás Maduro debe ponerse a derecho; entre ellos liberar a todos los presos políticos, aceptar la ayuda humanitaria y proceder con una agenda de elecciones.
Además, los liberales están planteándole al presidente del Parlamento Europeo una visita oficial a Venezuela con delegados de todos los grupos políticos representados allí. “Pero necesitamos también un acuerdo de nuestros aliados en Venezuela”, advierte Charanzová.
Ella aprendió español cuando estudió un año en España en la Escuela Diplomática. Nunca ha estado en Venezuela, pero está al día con las noticias.
¿HASTA CUÁNDO?
Ha habido tres resoluciones del Parlamento Europeo desde 2014; la última, hasta ahora, en junio de 2016. El gobierno de Maduro ha hecho caso omiso de ellas. Pero Dita Charanzová está esperanzada: “Escribí una carta a la alta representante [se refiere a Federica Moguerini, vicepresidenta de la Comisión Europea] y en su respuesta por primera vez se muestra de acuerdo en cambiar la política de la Unión Europea en torno a Venezuela.”
Hasta ahora, desde la UE se ha venido apoyando la mediación, es decir, el diálogo, pero como la misma eurodiputada dice, “el diálogo ha fracasado: no ha logrado sus objetivos.”
En esta nueva propuesta se incluye el apoyo a la resolución del Consejo permanente de la OEA en cuanto al calendario electoral. La diferencia con las otras resoluciones anteriores: la posición firme. Se prevén no sanciones económicas sino selectivas contra los oficiales o representantes gubernamentales que violan permanentemente los derechos humanos en Venezuela.
No sería la primera vez. Ya las ha habido contra Rusia; pero el PE no puede comprometer a los Estados miembros de la UE. El papel del Parlamento es difundir un mensaje político. Sin embargo, “sí pedimos a los Estados miembros, a través de la alta representante, considerar tales sanciones selectivas.”
El grupo parlamentario más grande es el PP, luego socialistas, después conservadores y, en cuarto lugar, ALDE. Charanzová es vicepresidenta de la Comisión de Mercado Único y Protección de los Consumidores; también forma parte de una comisión del mercado internacional, donde sigue de cerca las negociaciones entre Unión Europea y Mercosur.
─¿Se puede ser demócrata sin ser liberal? ─se le pregunta vía Sype.
─[Riendo] Es una pregunta difícil porque no sé si todo el mundo pueda estar de acuerdo conmigo: soy demócrata y además soy liberal, pero no sé si todos los demócratas son también liberales.
─¿Qué esperanzas tiene respecto al consenso en la reunión del 27 de abril?
─Está clara la preocupación sobre la situación, por ejemplo: hay que liberar los presos políticos y la Unión Europea debe fortalecer su ayuda humanitaria. Pero será difícil conseguir consenso en todo. La Unión Europea tiene que tomar el liderazgo y decir ‘ya es suficiente, no se puede seguir más’. Me parece que ya es tarde, pero no demasiado tarde, para enviar este mensaje.
─¿Qué le parece lo que dijo Rodríguez Zapatero, en cuanto a que Leopoldo López NO es un preso político?
─Claro que no comparto su punto de vista. No solo Leopoldo López es un preso político; hay varios presos políticos. Sigo en contacto con su mujer, Lilian Tintori, quien trabaja fuerte para un cambio en su país. La situación de su marido no mejora. Leopoldo López sí es un preso político y vamos a pedir que sea liberado no solo él sino también, por ejemplo, Antonio Ledezma.
─Si pudiera dirigirse usted a todos los venezolanos, ¿qué les diría?
─Les diría que nosotros los europeos estamos con vosotros, no les dejamos solos. Vamos a apoyar el proceso legítimo en su país para que vuelva la democracia.