Las elecciones del 4 de mayo para elegir nuevas autoridades en la Comunidad de Madrid, España, se presentan bastante reñidas. Dos bloques políticos e ideológicos se disputan el parlamento de la capital del reino de España. Son estas unas elecciones anticipadas. En términos tradicionales, se enfrentan “la derecha” (Partido Popular más Vox más Ciudadanos) y “la izquierda”, representada por el Partido Socialista, Más Madrid y Podemos. En términos personales, disputan la presidencia Isabel Díaz Ayuso (PP) y Ángel Gabilondo (Psoe).
Todos los estudios de opinión (menos el del oficial Centro de Investigaciones Sociológicas, CIS) otorgan la primera probabilidad de victoria a Díaz Ayuso. Pero la mayoría absoluta de 69 escaños en el parlamento, no está asegurada, menos aun en los actuales momentos en los que la campaña electoral se ha visto teñida con una serie de agresiones a eventos de Vox por parte de colectivos afines a Podemos y amenazas terroristas contra personalidades del bloque de izquierda.
En tales circunstancias, se encuentran los migrantes venezolanos, en condiciones de votar, asentados en Madrid. Dados a creerse la bolita del mundo, la verdad es que la migración venezolana, por su número, cuenta poco en estas elecciones, aunque su influencia política y su presencia creciente pudieran importar.
Según datos oficiales, en los últimos 20 años poco más de medio millón de extranjeros nacionalizados están residenciados en Madrid, la mayoría latinoamericanos. Esa población equivale al 10% de los cinco millones de madrileños llamados a las urnas. En estas elecciones, cada parlamentario «cuesta» 21.000 votos.
Pero, de ellos, el número de venezolanos no ocupa lugar prominente en los registros oficiales. Aunque ya son 400 mil los venezolanos registrados en España, la inmensa mayoría no ha cumplido el trámite de nacionalidad por residencia. Un estimado del diario El País, indica que son casi 39.000 los nacidos en el país sudamericano que tendrán edad de votar el 4M, pero de ellos, solo un 32 por ciento tendría derecho a votar: 12.385.
Según informe publicado por el diario Público.es, con datos del Ministerio de Inclusión, la mayoría de los extranjeros que ha conseguido tener el DNI español en Madrid son ecuatorianos (alrededor de 100.000), seguidos de los colombianos (unos 55.000) y los peruanos (menos de 50.000).
El Instituto Nacional de Estadística (INE) señala que entre 2010 y 2019, poco más de 28 mil venezolanos han obtenido la nacionalidad española, pero no todos viven Madrid. Según el grupo Defiéndete4M, que busca el voto migrante a favor del bloque de izquierda en los barrios populares madrileños, entre 2013 y 2019, los votantes venezolanos alcanzan a unos 5.300.
Las nacionalidades de origen más numerosas de las personas que obtuvieron la nacionalidad entre 2013 a 2019 en la Comunidad de Madrid son Ecuador (35.584), Colombia (24.914), Perú (24.422), Marruecos (24.320) y República Dominicana (21.997) (Fuente: INE).
Los partidos políticos, por su parte, poco han acogido en sus listados electorales a representantes de los migrantes. El Partido Socialista aupó al caraqueño Pedro Zerolo como concejal al ayuntamiento de Madrid entre 2003 y 2015. En las elecciones al Parlamento Europeo de 2019, el Partido Popular incluyó en su lista a Leopoldo López Gil. En estas elecciones regionales los migrantes postulados son escasísimos.
Votante o no, los venezolanos en España, en general, consideran a Podemos (y a su abanderado Pablo Iglesias) un aliado del régimen de Maduro.
Natalia Munévar, colombiana con nacionalidad española tras llegar como refugiada hace 15 años, activista de Poder Migrante, en Publico.es sostiene que «la inmensa mayoría de venezolanos en Madrid votarán a Ayuso. Los peruanos y los ecuatorianos también parecen ser más conservadores, incluso entre los colombianos hay grandes diferencias… El problema, sobre todo, es que casi ningún partido se dirige a nosotros, ni con candidatos ni con medidas ni con información».
