ANDREINA MUJICA
La carta del maestro Carlos Cruz Diez devuelve fuerzas perdidas, nos muestra la Venezuela que hay que recobrar, exhorta a la reflexión y a la elaboración de nuevos discursos, es un filósofo del arte y del oficio de vivir, hasta la indolencia de Dudamel –que hacía naufragar tanto talento entre ego y cobardia– ha sucumbido y ha presentado una carta clara después del vídeo ambiguo como Papa en Vaticano
El año 1992 lucia alarmantemente tranquilo en relación a lo que seríamos 20 años más adelante. En la Universidad Central religiosamente, cada jueves, había manifestación en las puertas de Plaza Venezuela. Belinda, una estudiante de Trabajo Social hallaría la muerte de la mano de un policía metropolitano que le disparó una metra dejándola prácticamente vegetal. La Universidad colapsó, nos invadió una tristeza acompañada de una impotencia que parecía interminable.
Una joven de 20 años había perdido la vida en una protesta estudiantil, habría podido ser yo o peor aún alguno de los amigos que estaban a mi lado. Cargamos su féretro, fuimos un solo grito silencioso en su despedida. Pensamos que esto no podía ser peor, un caso como este nunca más volvería a repetirse, nosotros juramos no olvidar a Belinda, de hecho hay una placa en Trabajo Social en homenaje a su trágica y temprana muerte.
Quedamos en pañales. ¿Cuántas veces Belinda en está dictadura cínica y perversa? Ha quedado claro que NUNCA MAS un militar en el poder, esto es lo mínimo que hemos aprendido y, sin embargo, seguimos rogando que así sea, cada mañana y a cada instante.
Dicen que un buen estratega se adelanta dos pasos a su enemigo. ¿La oposición, llámese MUD, diputados, alcaldes, etc, tiene esto claro? Los soldados, los guardias nacionales, la policía bolivariana, los colectivos no son venezolanos, no pertenecen a mi país, unos serán cubanos entrenados para aniquilarnos y otros el mentado «hombre nuevo hecho en revolución», pero no representan Venezuela, eso es seguro.
Estos años nos han enseñado que periodistas como Fernando Del Rincón o un entrevistador como Jaime Bayly tienen una venezolanidad insospechada, Almagro está tan comprometido que uno cree haber tenido clases con él en las aulas de la UCV. Pero esto no basta. Si bien fuimos «inoculados» por un surtido grupo de cubanos entrenados para matar, urge que integrantes de las Fuerzas Armadas defiendan lo que juraron defender, saquen fuerza y el coraje suficiente para enfrentar a este ejército sanguinario que está asesinando a la gente a cuenta gotas y con perversion. No son colectivos, son paramilitares enfermos.
VAN 39
A Juan Pablo Pernalete le explotaron el pecho, Angel Enrique, un joven de 25 años, nadador, deportista lo desmembraron en la autopista, el fotógrafo de 19 años que fue pisado por una tanqueta, no una sino dos veces y un milagro lo tiene con vida. La estudiante en San Cristóbal quedó como un dibujo inerte sobre el pavimento, el joven músico no tocará más el violin porque le quitaron la vida de un tiro en el cuello, cientos de personas tienen sus cuerpos marcados con lesiones de perdigones, balas que pasando surcaron extremidades, la firma de Chávez son las quemaduras de segundo y tercer grados de los manifestantes, el chavismo tomó un camino sin retorno posible, el horror, la perversión, la crueldad.
Como si estuviésemos en el siglo XVIII, el vídeo de un PNB disparando con tal efervescencia que atina al cuello de su compañero es tan sólo una muestra del afán por apretar el gatillo cuantas veces sea posible sin mirar consecuencias.
La señora portuguesa que se para ante la tanqueta, el cuerpo desnutrido y desnudo de aquel que parecía un Cristo rogando biblia en mano que pararan de gasear a la manifestación, el chico que toma un cuatro y anima a no claudicar con la fuerza de la convicción, la toma que se repite como si de un lopper se tratara de un estudiante armado con un pañuelo tomando en sus manos una bomba lacrimógena y devolviéndola a sus agresores sin miedo, todos y cada uno se van convirtiendo en suerte de íconos de lucha, pero, ¿hasta cuándo veremos bailar a Maduro?
Tiene que haber estrategia, fechas aproximadas, medidas a tomar, acciones que sorprendan a los opresores. La carta del maestro Carlos Cruz Diez a sus 94 años devuelve fuerzas perdidas, nos muestra la Venezuela que hay que recobrar, exhorta a la reflexión y a la elaboración de nuevos discursos, es un filósofo del arte y del oficio de vivir, hasta la indolencia de Dudamel que hacía naufragar tanto talento entre ego y cobardia ha sucumbido y ha presentado una carta clara después del vídeo ambiguo como Papa en Vaticano.
Toca trabajar por etapas, pero estar preparados para las que se avecinan. Saldremos de esto con honor y cicatrices. Seremos mapa nuevo de país, ni IV ni V, una nueva Venezuela debe nacer. El chavismo debe ser sepultado, no los manifestantes.
@andreinamujica